miércoles, 11 de marzo de 2009

Mi moneda en la Fontana di Trevi (Fuente de Trevi)

votar
[Posts relacionados: Me voy a Roma, Coliseo de Roma, Blogueros, Fuente de Trevi, Arco de Constantino y Templo de Adriano, Plaza de España, Via di Condotti y la moda, Rosa de los vientos en el Vaticano, Plaza del Popolo, Señales, Basílica Santa María de los Ángeles, Plaza Navona, Panteón de Agripa, La Casa de Goethe, Plaza de San Pedro (I), Plaza de San Pedro (II)]

"¡Y en la Fuente de Trevi tira tu moneda, que eso trae suerte!", así había oído con anterioridad. Por eso la Fontana di Trevi estaba entre nuestras prioridades cuando visitamos Roma. Y no precisamente porque no tuviéramos suerte, que ya el sólo hecho de estar paseando por esa hermosa ciudad era una de las mayores que he tenido en mi vida, difícilmente superable, sino por admirar, con mis propios ojos, la belleza arquitectónica de la barrocas y famosas esculturas.

Con el mapa en la mano y seguros de estar cerca del lugar, caminamos hacia abajo por esta callecita:


Al final, un "ahhhh" de asombro, de admiración, de sorpresa, de estupefacción. Muda me quedé. La fuente es linda, es preciosa, es bella, es hermosa.


El tema central del conjunto escultórico es Domando las aguas. El dios Neptuno, con un arco de triunfo de fondo, va en una carroza en forma de concha guiada por dos tritones (o dioses de las profundidades marinas) que doman a dos caballos de mar (o hipocampos). A la derecha de Neptuno está una mujer, alegoría a la Abundancia, que vierte agua de su urna simbolizando que la ciudad de Roma tendrá prosperidad. A la izquierda está Salubridad (o Salud), y sostiene una copa de la que bebe una serpiente, simbolizando la salubridad de esa agua nueva que llega a la ciudad.


La Fuente de Trevi se terminó de construir en el año 1762. Hasta nuestros días han pasado muchísimos años pero uno de los más famosos fue en el que se filmó la siguiente escena:


Escena famosísima de la película La Dolce Vita (1960), de Federico Fellini, con Silvia (Anita Ekberg) y Marcello (Marcello Mastroianni), una escena considerada ícono en la historia de la filmografía.

Y bueno, Anita Ekberg no ha sido la única que se ha bañado en la fuente... Yo por lo menos he sido testigo:


Un paneo de izquierda a derecha, vista la fuente de frente...


No me olvidé de la moneda, claro que no. Según Wikipedia, quien arroja una moneda en la fuente volverá a Roma, quien arroja dos monedas se enamorará de una guapa romana (o romano) y quien arroja tres se casará con ella (o con él) en Roma. La mía la tiré por encima del hombro y de espaldas a la fuente, como reza la tradición, y fue una sola, ¡que ya estoy casada, eh!
Share |

14 comentarios:

Neysa G dijo...

Que bellas fotos Aguaya!!!. Ya pase por el post anterior y vi las fotos del encuentro bloguero. Esperamos que de este viaje y encuentro recibamos muchos y muchos reportajes.

Anónimo dijo...

Preciosas fotos, la narración, el video de la Dolce Vita, un conjunto que hacen de este post algo digno de verlo, volver a verlo, requeteverlo...
Felicidades por esto tan bello.
Besos.

Hernan Rodriguez dijo...

Lindas fotos y te tengo que dar mis felisitaciones porque eres una persona que si fueras graduada de Historia a este punto ya fueras una Doctora de la materia por la forma que cuentas tu spot.
sigue asì que vas fuertisimo.
un besos
Hernan.

Noelplebeyo dijo...

Volverás a Roma y la próxima vez echa dos euros...que me vendrán bien jeje

Eufrates del Valle dijo...

Un post espectacular. Que hermosos todos los detalles de la fuente!

E-migrad@ dijo...

Delicioso tu post. Las fotos, la narración...

Dan ganas de coger un vuelo ya! jejeje...

Me alegra que lo hayan disfrutado tanto.

Cariños,

E-migrad@

Hildalma dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Hildalma dijo...

Estupendas fotos Aguaya, y simpatica la emula de Anita que se hacia el baño, has estado en Florencia tambien alli tuve yo un ataque de boca abierta por tres dias, cunata belleza, pero nada como Roma , es la Unicaaaaaa!!!si bien el Duomo de Milano es encantador.

Rosa dijo...

Cuanta belleza, y contada por ti, es como soñar que estás allí. Espero que tu moneda me traiga suerte a mi también, y para cuando vuelvas poder encontrarnos por allá, a ver si me uno al mini-encuentro blogger ...

Anónimo dijo...

Nosotros decimos que eres una diletante, has ganado gran maestría y conocimiento para construir tus post. Roma los espera de nuevo y quizá Firenze sea una magnífica opción. Un abrazo desde México. Unsinagawa

lola dijo...

Hola Agua, desde que comencé a leer tu post, me acordé de la escena de La Dolce Vita, con Anitona bañándose en la fuente, esa imagen ya pertenece a la inmortalidad del séptimo arte. Aunque hay más películas que tienen a la fuente de protagonista, Three coins in the fountain es una película de 1954 de Jean Negulesco, el tema musical de la película fue muy famoso en su época.En España la película se llamó Creemos en el amor, en Cuba mantuvo su nombre original.
¡has tenido una gran suerte de estar en un sitio tan precioso! Debiste haber emulado a la Eckberg, aunque supongo que multarán a quien lo haga.
Saludos!

Zoé Valdés dijo...

Bellísimas las fotos. Me fascina Roma, y este es un lugar muy especial. También tiré la moneda, el fondo brilla de monedas. Tienes una manera muy dulce de contar tus viajes.

Chez Isabella dijo...

Agua, sabes que me encantan tus fotoreportajes sobre las ciudades que visitas, ya sea en Alemania como en otros lares. Pero, amiga, este de Roma es diferente. Se te sale la pasion y la fascinacion que experimentabas al recorrer sus calles. El placer que te provoco la experiencia estetica del choque cultural con aquella mitica ciudad esta plasmado en cada palabra, en cada imagen de tus posts. Gracias por compartir con nosotros tus vivencias.

Otra cosita, te queria decir que inclui los dos logos (Damas de Blanco y Free Internet) en mi blog. Bueno, vi que ya pusiste el eco del de las Damas. Gracias a ti y al Platano Alegre por esta idea.

Un abrazo bloguero.

Is

Aguaya dijo...

Linda la compan~ía de ustedes en mi paseo por Roma!!!!!!!!!!

Sí, se me sale por los poros la contentura :-)

Un abrazo bloguero para todos!