Esta es Tily:

Es muy inteligente, muy fiel, muy cariñosa pero resabiosa también. Una pareja de ciudadanos americanos que conocíamos en casa desde tiempo atrás la encontraron al lado de un latón de basura. La madre, bajo un torrencial aguacero, se llevó uno por uno a los cachorros para un lugar más seguro y por Tily no llegó a regresar, quizá por lo calladita que estaba. La historia es larga: bañaban a la perra con su gel de baño, le compraban cajas de leche (nosotros no teníamos), le compraban dulces, y la tenían como una reina. Hasta que tuvieron que irse y nos la dejaron a nosotros, apenas de 3 meses. Tily debe tener unos 12 años.
Esta otra es Canela, una salchicha, cogiendo sol:

Esa es mi perrita. Yo se la compré a una muchacha de mi trabajo en 10 dólares. Canela es muy vaga y remolona. Dicen que los salchichas tienen un carácter "de perros" pero ésta mía es una faraona, si por ella fuera se quedaba cogiendo fresco en la ventana, a la que pide que la carguen. Sin embargo, cuando pasa un gato, ella vuela y se sube de un tirón.
Esta otra es Caty, hijita de Canela (fueron 5 hermanitas).

Caty murió como a los 4 años de una enfermedad fulminante. Yo sólo la conocí en fotos. En mi casa sufrieron mucho con su muerte pues perrita más cariñosa y alegre que esa no la conocimos antes. Mi papá escribió unas líneas sobre Caty que yo publiqué en su blog...
Bueno, pues esas tres pupes son (era Caty) las reinas de mi casa, de la casa de mis padres. Cuando veo los comerciales en la TV anunciando las comidas para perros y gatos me acuerdo siempre de mis perritas. Allá, las pobres, se tienen que conformar ahora con un poco de arroz con alguna salsita que haga mi mamá para echarle por arriba.
¿Y qué comen tus mascotas?