viernes, 31 de octubre de 2008

El camino de las especias...

votar

Cuando mi mamá y mi suegra han venido a Alemania de visita para quedarse "una temporadita" con nosotros, las hemos alejado en lo posible de la cocina. Entre mi esposo y yo nos encargamos de esa tarea como solemos hacer cotidianamente. Ellas descansan de la rutina diaria y por un tiempo se olvidan de los conflictos, preocupaciones y desilusiones que significa el poner un plato de comida en la mesa de una familia cubana.

En algunas ocasiones las hemos dejado hacer sus cositas, no obstante. Por ejemplo, a mí me encantan las sopas y los ajiacos que hace mi mamá. El dulce de arroz con leche, ni se diga. Y mi suegra bateó jonrón la última vez cuando me sorprendió con un plato de harina con chicharrones pequeños de puerco y unos huevos fritos "de adorno".

Siempre miramos por encima del hombro: hay que estarles repitiendo que no ahorren en nada, algo que inevitablemente deben hacer para inventar cómo estirar lo poco que pueden conseguir en los mercados cubanos. Ellas allá se han tenido que acostumbrar a cocinar "a secas", perdiendo costumbres y recetas por falta de condimentos o especias. Casi se desmayan cuando nosotros añadimos tres dientes de ajo a una receta que los lleva, a la que ellas a lo sumo echaran medio pedacito para darle sabor a la comida pero para garantizar también la del día siguiente. "¡Echa, echa lo que lleva, no me ahorres!", les tenemos que repetir constantemente.

Varias personas me han dicho que la cocina cubana ya no sabe a nada. Han sido muchos años de escasez y ahorro. Muchas de las recetas, algunas de las cuales han pasado de generación en generación, se han atrofiado o perdido. En una tienda relativamente nueva de la Habana Vieja, en la calle Mercaderes, hasta se pueden comprar especias exóticas pero, con los precios (en moneda dura) a que se venden, mejor pasar de largo. Mami ha ido un par de veces pero me dice que ni conoce para qué se usa la mayoría de los condimentos y especias ofertados.

Pobre Marco Polo si volviera a vivir... evitaría su paso por la Isla para no ver fracasar su negocio. Bah, ¡qué le importa a los de arriba que lo único que haya para echarle a un arroz sean cuadritos concentrados! ¿La sazón cubana actual? Ah, Marco Polo, te recomiendo la casa de un cubano en el extranjero.... El camino de las especias, de seguro, no te llevará a Cuba. Qué pena.
Share |

10 comentarios:

Diliviru dijo...

Es una pena Agu... Pero hay algo que decia mucho mi abuelita que mas alla de las especias y todo aquello existe el sazon, o la sazon como le digas, la mano le dicen tambien por aca, estoy segura que de eso tanto tu mami, como tu suegra y muchas señoronas cubanas lo tiene!! Un abrazo

Morgana dijo...

Hola!

Si, pero es verdad que la comida cubana se está perdiendo. Ahora practicamente todo se cocina con cebollín, ajo y dos o tres cositas cuando aparecen. Mi mami cuando le pregunto sobre lo que necesita que le lleve o mande siempre me dice: Mi niña, condimentos! Pimienta! Anís! Nuez Moscada!
Es que luego me preguntan por recetas cubanas y fuera del congrís, yuca con mojo, tostones y dos o tres cosas más...se me acaban las ideas.
¿Cómo va a aprender una cubana nacida en la revolución la receta de ropa vieja que nosecuantos gramos de carne de RES lleva?

Saludos!

Eufrates del Valle dijo...

La cocina cubana se fue del pais, se tuvo que ir... sino, como iba a mantener la tradicion? Cuando visites Miami la conoceras y degustaras. Asi fue como la conoci yo.

Rosa dijo...

Es que hasta desabríos nos han obligado a ser. Pero lo peor no es la falta de condimento, sino de "condumio" en general, que ya empiezan otra vez las anemias y la neuritis, que horrorrr! Me imagino lo rica que debe haber estado esa harina de tu suegra, aparte de todo la gente "de antes" tenía más mano, como dice Dianita, pa la cocina. Besitos,

Rosa

Iván dijo...

Hola AB.....
Un brinquito pequeñito
Ayer fue el cumple del Isleño y Betty hizo una llamada de felicitación. Hablé con ella un momento y rápido entre otras cosas hablamos de los bloggers.
Lo siento pero estoy a tiempo completo en la pincha y en la casa como sabes "todavía" no tengo conexión (que extraño). Nada estoy bien, pero me han sabido aprovechar bien las vacaciones que tomé. Pronto estaré de vuelta. Un besote para ti y un saludo para el resto del equipo.
Y las especias.... alabaoooo, muchas las conozco de nombre y otras pocas veces las he visto.

Lena dijo...

Que tristeza haber perdido esa parte de la cultura tan importante para un pais. Espero que algun dia las cocinas de Cuba se puedan llenar de esos aromas por ahora olvidados.
Un saludo,

Aguaya dijo...

Con algo de atraso, los saludo.......

Pues sí, la tradición se va perdiendo cuando las nuevas generaciones no tienen en las manos más que las recetas antiguas, de las que no conocen la mitad de los ingredientes, o los conocen pero no los pueden usar por ser caros, o no haber, o no saber cómo usarlos. Y ahí está el problema.

Yo misma, por ejemplo, tengo grabado el sabor de las sopas que hacía mi abuela materna, como si me estuviera comiendo una ahora... Más nunca he probado una sopa con ese sabor. Qué le echaba?? Nadie me sabe decir... Clavos? pero si yo pensaba hasta el otro día que los únicos clavos eran de metal!!

Gracias a todos por pasar!!!!!!!

Anónimo dijo...

He visitado tu blog y he encontrado muchas cosas interesantes. Te deseo éxitos.

Aguaya dijo...

Qué tal, María Elena! Bienvenida!

Gracias por pasar y por tu comentario. Me alegra que te guste mi "bebé" :-)

Mike Balkans dijo...

Look like a great place which is really great to visit!