Cada uno de los posts de la trilogía siguiente presenta un mismo tema pero desde diferentes ángulos. Contado por tres bloggers, qué es el miedo nos llega desde la voz de un cubano que vive en la Isla, desde la de una extranjera, portuguesa ella, que ha ido a Cuba en más de una ocasión, y desde la de una cubana que ya no vive en su país pero que mantiene relaciones de amistad con los amigos que dejó atrás.
El primero de ellos es el blogger Solo ojos, cuyo blog sigo de cerca y les aconsejo lean, Detrás de un par de Cristales, escrito desde Cuba. El post ¿Dilema? ¿Frustración?, describe lo que piensa este cubano sobre el miedo y lo que piensa su mamá. Este es un fragmento de lo que le aconseja ella:
Si tratas de hacer eso, puedes darte por seguro de que nunca más podrás trabajar en algún lugar decente o ganar el salario que ganas ahora, pues nadie o casi nadie te va a seguir pues todos están o casi todos están acostumbrados a vivir del invento, a ver que se roba en el trabajo, sin tocar el tema más delicado que es el gran miedo y autocensura que existe en la mente de muchas personas que no se atreven a ver más allá de sus narices por éstos y muchos otros intereses a los que están comprometidos.
-O sea que al final serás para la mayoría o para los que tienen el mazo en la mano, un Gusano, un mal agradecido y un Delincuente (agrega Solo ojos).
La blogger portuguesa, Sofía, nos cuenta desde su blog O significado de medo em Cuba (El significado del miedo en Cuba) según su experiencia personal en dos viajes que hizo a la Isla. Sofía se inspiró en el post de Yoana, la tercera blogger, titulado Sobreviviendo y sin huevos, donde el miedo nuevamente es el tema central.
Tres verdades, tres maneras de analizar por qué los cubanos sienten miedo (sentimos, hemos sentido, sentiremos, ¡cómo se puede conjugar este verbo donde prácticamente no caben tiempos verbales pretéritos!) y a qué se le teme. Solo ojos lo resume en una frase: "el miedo a perder lo poco que tengo". Y es que los cubanos, la inmensa mayoría, tiene muy poco y, perderlo, puede significar también perder el sentido de la vida, a menos que se busque en otro país.
¿Con los blogs se sentirán mis coterráneos más libres de expresar lo que sienten? Solo ojos dice que sí. Hay que multiplicarlos entonces.
